Una preocupación permanente de la Dirección es mantener una organización funcional y sumamente flexible, que asegure una rápida capacidad de respuesta a los distintos requerimientos que se presentan en la actividad consultora, sin que ello interfiera en la consecución de los objetivos de calidad mantenidos por la Empresa para sus servicios profesionales. Tal flexibilidad ha sido posibilitada por:

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• La calificación y experiencia de los profesionales que integran los distintos equipos de alto desempeño.

• El incremento de capacidad técnica que significan los acuerdos de colaboración estratégicos con firmas consultoras de especialidades complementarias.

• Un amplio cuerpo de consultores independientes integrado por especialistas con extensa experiencia profesional.

 

La integración y la complementariedad nos asegura un tratamiento especializado y el análisis interdisciplinario en pos de la búsqueda de soluciones reales y perdurables para cada uno de los proyectos encarados.